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 Este año 2016, los argentinos celebramos el Bicentenario de la declaración de la Independencia de nuestra Patria y es una ocasión adecuada para la reflexión, análisis y balance.
Entonces, si en 1816 nos independizamos del dominio español, la pregunta que nos podemos hacer es: ¿le falta algo a nuestra independencia? La respuesta es afirmativa. Pero como dice el Dr. Espeche Gil: “Eso no debería llamarnos la atención porque la independencia es un proceso permanente. No es el fin del camino, sino el camino mismo de independizarse”.
Por ello, debemos tomar la causa del Bicentenario como una ocasión para Pensar la Patria. Ello exige un compromiso ciudadano, que no ignore los problemas, como tampoco las fortalezas y las debilidades que tenemos y, a partir de ello, comenzar a accionar positivamente para lograr el desafío comunitario de una sociedad justa, pluralista y democrática sobre la base de puntos de encuentros, teniendo a la persona como sujeto de derechos y en una justicia redistributiva que recree el sentido de equidad social como un desafío impostergable de este momento histórico.
El 10 de diciembre de 2015, con la asunción del presidente Mauricio Macri se inició una nueva etapa en la historia de nuestra Argentina, con una visión diferente sobre la política internacional y la relación con el resto de los países del mundo. Ello me da esperanzas sobre la posibilidad cierta de un fortalecimiento de las relaciones entre nuestro país y el de nuestros antecesores, el Japón. Prueba de ello es la media sanción con modificaciones que se dio en la Cámara de Diputados de la Nación al proyecto de ley que permite la Participación Público-Privada, más conocida en el mundo como P.P.P. que facilitaría la posibilidad de inversiones en obras de infraestructura y la concreción de importantes obras dentro del Plan Belgrano, como es el Segundo Puente Chaco-Corrientes.
Siendo que este año se cumple el Bicentenario de la declaración de nuestra Independencia, como descendientes de japoneses y ciudadanos argentinos seamos protagonistas activos del cambio, desde cada lugar en donde nos desempeñamos, ya que la Política se construye entre todos para cumplir el sueño de nuestros abuelos inmigrantes, nuestros padres y los propios de un modelo de País que todos deseamos.
* Diputada nacional. |