A propósito de Kagemusha, el tema del doble, sosías y el descubrimiento del usurpador. ¿La vida imita al arte mucho más que el arte a la vida?

Un ladrón se vuelve un impostor, pero con tanta dedicación hasta creerse ser el personaje que actúa.
El personaje ficticio fue escrito y dirigido por Akira Kurosawa para la película Kagemusha, estrenada en 1980, y la cual retrata un período histórico del Japón feudal. El tema del sosías, o doble, o impostor, está más que simbólicamente expresado.

Para algunos, “El arte imita a la vida”; para otros, “la vida imita al arte mucho más…”.
Así, en la Argentina de fines de los años y principios de los años 80, dos empresas, Socma y Sevel (entre otras tantas), propiedad de Franco Macri –un inmigrante italiano de posguerra que logró toda una fortuna-, pasaron sus pasivos al Estado. Y ahora nos enteramos que en 1981 se creó una empresa, pero con domicilio legal en Panamá, llamada Kagemusha.
Mauricio Macri es, o figura, como director y vicepresidente. Kagemusha es propiedad de Franco Macri, el padre del Presidente argentino, según indicó Marcos Peña, el jefe de Gabinete. Uno carga con la sombra del otro, y quizá así debe ser. “Si tu papá era empresario y se hicieron cargo de su deuda, por lo menos hay que guardar respetuoso silencio", dijo hace tres años la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

La caída de todo el clan
El kagemusha de la película se va transformando, muestra un cambio y logra burlar a todo un entorno. Y Aunque uno muerto, con el otro, su doble o impostor, se crea un vínculo secreto, salvo para unos pocos. Entre el digno y el granuja, todo se mezcla. Son dos, pero uno, el vivo, el otrora ladrón, es quien mantiene viva una ilusión (en la película de Kurosawa, el doble asume como jefe por una necesidad). El tema, sin embargo, es siempre el engaño. 
Y así de mimetizado, repite todo un lema épico (“Rápido como el Viento, fiero como el Fuego, sereno como el Bosque y firme como una Montaña”); comanda a sus soldados a la batalla, los inspira para la victoria. Excede confianza.
Cumple el papel a la perfección, convence y engaña con la misma sabiduría del verdadero líder, y su porte y modo de actuar contrastan con los del hijo desplazado.
Pero los actos humanos, salvo excepciones (“Soldado de Dios y la Patria”), son precarios, y aunque a veces nobles, se descubren finitos, fugaces. Es lo dramático de nuestra condición. Pese a que el hombre se encapriche en conquistar el poder, luche por alcanzar la gloria, el destino es más fuerte. 
El kagemusha cae del caballo y es descubierto porque carece de las cicatrices de guerra, lo que lo revelan como lo que es o fue: un usurpador. No existe un órgano que lo juzgue, para él no hay justicia, al menos en este mundo, que lo salven, solo le queda lo más bajo. Quien descubre su engaño es una criada.
El ladrón es sacado fuera del palacio. Y a la caída del kagemusha le sigue la caída de todo el clan.
Pero dijimos: el kagemusha se ha transformado, se ha mimetizado, ha tenido la bendición de ser alguien, y en un intento final de lealtad, de heroicidad trágica, toma un arma y se lanza contra el enemigo.

Nombres aleatorios

La mayoría de los nombres de las sociedades offshore se adjudican de manera aleatoria y la responsabilidad recae sobre el mismo estudio que abre las sociedades, por lo que muchas veces, sus dueños ni siquiera llegan a saber sus significados. Así como Kagemusha es un "doble", una persona similar a otra cuya función es desviar la atención del público, Fleg Trading, la otra empresa en donde figura Mauricio Macri como director, significa "Comercio de sustos": "fleg" es una manera coloquial de nombrar al "susto" en Escocia.

“Primero aparece Japón”

El embajador argentino en Panamá, el actor y humorista Miguel del Sel, defendió al presidente Mauricio Macri luego que se revelara su participación en sociedades offshore, al destacar que el mandatario "dio su explicación" y le cree, pero minimizó este tipo de operaciones en paraísos fiscales porque, enfatizó, "es algo que se usa en todo el mundo". Y agregó: “En el listado de creación de cuentas o sociedades offshore, Panamá aparece 14. Primero aparece Japón y Estados Unidos aparece tercero. Con esto no quiero estar atacando ni defendiendo".

Sesgo geopolítico

Los resultados del supuesto trabajo periodístico conocido como Panama Papers habrían revelado 214.000 empresas off-shore vinculadas con residentes de 200 países. Pese a esas definiciones, en relación al alcance geográfico de los documentos filtrados, la producción de noticias existente en el sitio oficial y las que aparecieron en los sitios de cada uno de los medios comunicación involucrados a nivel internacional, estuvo concentrada en un puñado de casos con un marcado sesgo geopolítico. Se publicaron casos que involucran a residentes de casi la totalidad de los países del cono sur (con excepción de Bolivia), de Rusia, de China, Iran y Siria, entre otros.
Según se han quejado algunos medios de comunicación sin acceso a la información completa, entre los países involucrados no figuran Estados Unidos, Alemania, Israel y Japón, y si la mayoría de América Latina, Rusia y China.