Viernes, 08 de Mayo de 2015
Agasajo de despedida al embajador Masashi Mizukami

El embajador del Japón en la Argentina, Masashi Mizukami, fue el destinatario de una fiesta organizada por la Federación de Asociaciones Nikkei en la Argentina (FANA) y el Círculo de Condecorados, debido a su pronta partida de nuestro país.
El agasajo se realizó durante la noche del pasado miércoles 22 de abril, en la sede del Centro Okinawense en la Argentina.  Masashi Mizukami, quien después de haber ejercido la representación diplomática del gobierno de Japón ante el gobierno  argentino durante más de tres años, regresará a su país.

El diplomático concurrió a la cena acompañado de su esposa. Para la colectividad japonesa, el embajador Mizukami fue una de las autoridades que más contactos mantuvo con la comunidad de inmigrantes nipones.
A la hora de los discursos, el presidente de la FANA, Akira Ikegaki, recordó que el embajador siempre acompañó a la colectividad en todos los eventos organizados por las asociaciones, enumerando los numerosos actos organizados por las entidades nikkei en las que el diplomático estuvo presente.
El brindis estuvo a cargo del presidente del Circulo de Condecorados, Akio Matsuya. 
El embajador, por su parte, agradeció a los presentes, y señaló que dejaba en la Argentina a muchos amigos.
Concluida la cena, Mizukami recorrió mesa por mesa para saludar y dialogar distendidamente con cada uno de los asistentes.
Según el embajador, él vuelve a Japón, pero aún desconoce su nueva función. Estima que antes de desempeñar otra nueva misión diplomática, permanecerá en Japón desempeñando alguna función durante  un año o año y medio.
Posteriormente, se le obsequió un ramo de flores a su señora y, a Mizukami, un pergamino firmado por los asistentes. 
Párrafo aparte para un pequeño incidente. Esa noche hubo un corte de luz que se debió, al parecer, a un siniestro en el barrio que afectó la distribución del fluido eléctrico. Y si bien la institución tenía preparado un generador eléctrico, y no hubo mayores inconvenientes, durante una parte de la velada, hubo un momento en que el salón fue iluminado con la luz de velas.