Dentro Iº Congreso de Instituciones organizado por FANA, y como parte de la mesa de actividades para jóvenes, uno de los espacios fue para la filial argentina de Ryukyukoku Matsuridaiko, la cual, con más de 50 miembros, ya lleva más de 10 años dentro de la colectividad japonesa difundiendo Eisa y la cultura de Okinawa en la Argentina. La agrupación, nacida en Okinawa hace 30 años, cuenta con más de 45 filiales en Japón y en el mundo.
Si bien Matsuridaiko, desde sus comienzos, tuvo pequeños encuentros con otras filiales con poco resultado de intercambio, todo comenzó en el año 2008, cuando, aquí, en la Argentina, se cumplieron 100 años de la inmigración okinawense. Por ese motivo, en el mes de agosto se realizó un desfile a lo largo de la Avenida De Mayo. Ryukyukoku Matsuridaiko encabezó dicha celebración, con más de 200 miembros, en la cual tuvimos la oportunidad de contar con la participación de las filiales de Okinawa Honbu (Central), filial Bolivia y filial Perú. A partir de este evento, tanto los miembros de la filial Argentina, como los miembros de las filiales extranjeras, comenzaron a crear lazos de hermandad, tras descubrir que gente de otros países intentan cumplir los mismos objetivos de la agrupación en sus respectivos países.
Finalizado este emotivo evento, quedaron promesas de reencuentros. En el año 2010, la filial Perú celebró su 10º aniversario. Con el fin de cumplir esta promesa de reencuentro, y dar apoyo para la realización de este evento, viajaron 25 personas desde la Argentina. Este encuentro tuvo la particularidad de que, por primera vez, se realizó un intercambio de cuatro países en un mismo evento (Argentina, Brasil, Bolivia y Perú). Una experiencia única para los chicos que pudieron viajar, ya que no sólo se han fortalecido los lazos, sino que también se empezó a desarrollar un interés por las culturas propias de cada país participante. El mismo año, en Argentina se realizaron las celebraciones en conmemoración al Bicentenario de la Revolución de Mayo, en la cual Matsuridaiko fue convocado junto a otras agrupaciones de Taiko en la Argentina para realizar dos desfiles: en la Avenida De Mayo y en la Avenida 9 de Julio. En esta ocasión, tuvimos la compañía de las filiales de Perú y Brasil. Para Argentina, era la primera vez que integrantes brasileños participaban conjuntamente en un evento en el país. Fue algo sorprendente, ya que durante el mismo año pudimos reencontrarnos con hermanos que habíamos encontrado previamente en Perú. En consecuencia de la hermandad entrelazada entre las filiales sudamericanas, y con el acercamiento del 5º Festival Mundial Uchinanchu, en octubre de 2010 Okinawa Honbu invitó a miembros de todas las filiales del mundo a participar de un preevento. En esa oportunidad, en representación de la Argentina, viajaron tres miembros hacia Okinawa. Esta fue la primera vez que se juntaban miembros de todas las filiales extranjeras para tocar juntos en un evento. En 2011, Bolivia cumplió sus 10 años. Con promesas de por medio, en febrero del 2011 más de 100 personas de Okinawa, Argentina, Brasil, Perú y Texas se congregaron en Santa Cruz de la Sierra para dichas celebraciones. Son experiencias que uno nunca olvida y, como agrupación, forja más la unión. El poder compartir, contar anécdotas, contagiar a sus compañeros esta sensación, mantener el contacto y la amistad con otros países, es una experiencia única. En el mes de octubre del mismo año, en Okinawa se realizó el 5º Festival Mundial Uchinanchu, en el cual descendientes okinawenses del mundo vuelven a su tierra natal con el objetivo de participar en un intercambio sociocultural. Miembros del grupo de varios países viajaron con la finalidad de participar de este encuentro, así como también para reencontrarse con los miembros de Okinawa Honbu. Este encuentro ha fortalecido el acercamiento de miembros que nunca han podido viajar hacia América y a lograr que se interesen por la cultura de otros países. Ya finalizando el 2011, a través del embajador de Buena Voluntad de Okinawa en la Argentina, tuvimos la oportunidad de recibir a una miembro de Okinawa Honbu, con el fin de perfeccionar el Eisa en la Argentina. Durante un mes, se realizaron prácticas intensivas en Buenos Aires (Capital Federal, Florencio Varela, Morón) y Córdoba. Se fue logrando una cadena de promesas y muchos proyectos juntos. En estos momentos, las filiales tienen como punto de reencuentro en Okinawa el próximo año para festejar que Ryukyukoku Matsuridaiko Okinawa Honbu cumple los 30 años de su fundación. Promesas tras promesas, proyectos tras proyectos, esto logra que los jóvenes se conecten y vivan estas experiencias únicas. Nosotros siempre tenemos presente la palabra 迎恩 (Geion). Una palabra que significa recibir, aceptar, acoger (Gei) y agradecimiento, gratitud, deuda (On). Y esto es lo que Ryukyukoku Matsuridaiko logra con todas las filiales, lo que se vive y se siente cada vez que compartimos algún encuentro. Esto es una breve reseña sobre los intercambios de la agrupación. Ryukyukoku Matsuridaiko es una agrupación sin fines de lucro. Los viajes y las participaciones de cada integrante para los diferentes eventos son costeados por cada uno. Los jóvenes trabajan, estudian y le dedican todos los domingos a las prácticas de Taiko y, en cada oportunidad que surge de poder reencontrarse con sus hermanos de otras filiales, hacen todos los esfuerzos posibles para poder concretarlos. La agrupación simplemente les provee el vínculo para que, donde viajen y se encuentren con alguna filial, les hagan sentir el Kimochi (sentimiento) de ser amigos de toda la vida. Argentina, dependiendo de la situación, aporta un pasaje a algún integrante para que pueda viajar. Esta recaudación se realiza a través de la realización de bonos contribución u organización de eventos. Los chicos hacen todo esto de corazón, a voluntad y a ganas. Es algo que a los chicos les ayuda mucho a crecer en lo humano.
* Director de Ryukyukoku Matsuridaiko, filial Argentina
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