Miércoles, 27 de Enero de 2021
Palabras para la colectividad nikkei en la Argentina
Escrito por Cónsul Yoshikazu Furukawa   

MENSAJE del Cónsul del Japón en nuestro país.

Reflexiones sobre el año 2020
El año pasado ha sido muy difícil para la Argentina y la colectividad nikkei, debido a la pandemia y al cambio de hábitos que nos tocó vivir a todos.

La mayoría de los eventos y festivales japoneses se realizaron de manera virtual o tuvieron que ser suspendidos. De la misma manera, casi todos los eventos de la Embajada debieron realizarse de manera virtual o ser cancelados.

Por momentos fue decepcionante pero, mirando en retrospectiva, considero que el balance es positivo.

Entre los eventos que se realizaron de manera virtual, FANA organizó una reunión de trabajadores sociales para la tercera edad, el Centro Nikkei organizó una reunión de jóvenes Nikkei, AJA organizó una reunión de cultura japonesa, el Instituto Nichia Gakuin organizó la reunión anual Nippon Manía, COA organizó la reunión del Día del Uchinanchu y el Festival de Canto, Gastrojapo organizó una reunión de comida japonesa que alcanzó a todas las provincias de la Argentina, la Asociación Japonesa de Florencio Varela organizó el Varela Matsuri y la Asociación Japonesa de Burzaco llevó a cabo una maravillosa reunión virtual con la agrupación “Tomonokai”, que asiste a los adultos mayores.

Afortunadamente, pude participar de la mayoría de las reuniones virtuales, lo que me permitió conectar con los participantes, no solo de la Argentina, sino también de países vecinos y de Japón. Realmente disfruté poder participar de las reuniones virtuales.

Por otra parte, pude reunirme con nikkei de Formosa, Neuquén, Río Negro, El Bolsón y otras provincias con las que no teníamos contacto, y el intercambio de opiniones fue muy enriquecedor. Quisiera destacar también a las Asociaciones Nikkei de todo el país que han trabajado con esmero para promover los cursos online de idioma japonés, brindándoles a muchas personas de diferentes regiones la posibilidad de participar y acceder al mundo del idioma japonés y a la cultura japonesa.

Quisiera destacar la solidaridad de las asociaciones japonesas y personas nikkei que, ante la crisis sanitaria por causa del coronavirus, no dudaron en contribuir con su ayuda a la sociedad argentina. Inmediatamente después de que se decretara la cuarentena nacional el 20 de marzo de 2020, la Asociación Japonesa de Florencio Varela ofreció sus instalaciones a la comunidad local para montar un centro de monitoreo de personas con síntomas de COVID-19, de modo de evitar el colapso de los hospitales de la zona. Por otra parte, la Asociación Japonesa del Alto Paraná, en la provincia de Misiones, donó botiquines, artículos de limpieza y barbijos a los hospitales, bomberos y comisarías locales.

Un miembro de la Asociación Japonesa de Burzaco realizó con su impresora 3D protectores faciales para donarlos a varios hospitales de la ciudad, y un miembro de la Asociación Nikkei de Tucumán reacondicionó parte de su casa para convertirla en un comedor infantil, al ver la necesidad que estaban pasando los niños de su barrio.

Hasta el día de hoy sigue funcionando dicho comedor que alimenta y ayuda a muchas personas necesitadas.

Los esfuerzos de estas organizaciones y personas nikkei nos recuerdan la importancia de la unión y la solidaridad, valores propios de personas nobles. Me gustaría expresarles mi más profundo respeto por estas acciones solidarias y desinteresadas que llevaron a cabo.

También me gustaría agradecerles su apoyo durante este año y expresarles mi sincera admiración y profunda gratitud por haber respondido de manera asombrosa frente a la pandemia, sin rendirse y siguiendo adelante con mucho esfuerzo y perseverancia, lo cual constituye un gran logro.

Reflexiones sobre los últimos cuatro años
El 29 de diciembre de 2016 comencé mis funciones en la Argentina y en el próximo mes de marzo, después de cuatro años de misión, regresaré a Japón, con lo que concluirá mi carrera en el servicio exterior.

En estos cuatro años tuve la oportunidad de participar de diversos intercambios con descendientes nikkei en el área metropolitana de Buenos Aires, en el interior del país y también en el exterior, por todo lo cual estoy profundamente agradecido.

En primer lugar, una semana después de llegar a Buenos Aires, asistí a la Fiesta de Año Nuevo del pueblo de Ginoza en Kyowaen de la Asociación Japonesa de Burzaco. Después de eso, participé en muchos eventos de la Asociación Japonesa de Burzaco, como el Burzaco Matsuri y el Festival de Canto, entre otros. Tambien participé de muchos eventos organizados por FANA, como la Fiesta de Bienvenida, la Fiesta de Año Nuevo, el Festival de Otoño y la Presentación de Danzas Tradicionales Japonesas. En los eventos organizados por la Asociación Japonesa Sarmiento, participé del Sarmiento Matsuri y del Festival de Canto, entre otros. De los eventos organizados por la Asociación Japonesa de La Plata, participé del Bon-Odori, que es el evento con mayor concurrencia entre los festivales nikkei, y del Festival de Canto. Por la Asociación Japonesa de Florencio Varela, asistí al Varela Matsuri y Keiroukai, entre otros. En COA asistí al Okinawa Matsuri, el Festival de Canto y Día de Uchinanchu, entre muchos otros. Por AJA participé en el seminario de introducción de la cultura japonesa, bazaa, eventos para recaudar fondos y, en el marco de la pandemia, en el seminario de cultura de Okinawa todos los martes, introducción a la cultura japonesa y seminario de historia de la inmigración japonesa, entre otros. Pude participar en muchos eventos organizados por la Fundación Cultural Argentino-japonesa en el Jardín Japonés, distintos eventos de difusión de la cultura japonesa, como así también el evento anual de presentación de la cultura japonesa en distintas partes del país, conocido como “Japón en ...”, como por ejemplo Japón en Chascomús, que se realiza varias veces al año. De los eventos del Centro Nikkei Argentino, asistí al DALE, al Día internacional del nikkei y a la ceremonia de entrega de premios a los jóvenes destacados nikkei, entre otros. Participé en diversos eventos organizados por el Nichia Gakuin, como el Nippon Manía y las ceremonias de graduación de la escuela primaria y secundaria. De los eventos organizados por Ataku, asistí al seminario de música destinado a adultos mayores, y a la fiesta de fin de año, entre otros. Asistí a muchos eventos organizados por la Asociación Japonesa de Acassuso, en la que es muy significativa la práctica de taiko entre los más jóvenes, y pude participar en la celebración de su 30.º aniversario. La Asociación Japonesa de Seibu pone el foco en la enseñanza del idioma japonés y en el taiko, y en su bazaa ofrece una variedad sorprendente de comida japonesa; una experiencia maravillosa. La Asociación Japonesa de Merlo tiene un gran patio de deportes, así como un salón japonés, y la singular fiesta de sukiyaki que se celebra en invierno a finales de julio de cada año es muy emocionante. La Asociación Japonesa de Marcos Paz, a pesar de no ser muy numerosa, mantiene sus instalaciones en muy buen estado y ha estado ofreciendo clases de idioma japonés durante muchos años. El REN ha organizado una serie de seminarios de introducción a la cultura japonesa en línea de alta calidad durante la pandemia. La Asociación Universitaria Nikkei, agrupación Tomonokai y la ONG Nikkei Solidaria han organizado muchos eventos para los adultos mayores nikkei y admiro la dedicación de todos sus miembros.

Participé también de la Copa del Cónsul organizada anualmente por la Asociación de Gateball en Argentina. Asimismo, de los eventos organizados por la Asociación de Golf del Parque, asistí a la Copa Consular anual en Escobar, La Plata y Mar del Plata. Me impresionó la vitalidad de los miembros de la Asociación de Gateball de Argentina y de la Asociación de Golf del Parque de Argentina. El Centro Daiwa ofrece clases de japonés, clases de comida japonesa y clases de Uchinaguchi. Participé también en variadas presentaciones culturales como la de la sucursal argentina de la Asociación de la Escuela Nomura de Música Clásica de Ryukyu, Ryukyu Sapukai, así como también de diversas danzas de Ryukyu, de taiko y de Ryukyukoku Matsuri Daiko. Me emocionó la difusión de la cultura japonesa y de la cultura okinawense que realizan.

En cuanto a los eventos organizados por los Kenjinkai, participé en varios eventos en COA de Nago Shimin-kai, Nanjo Shimin-kai, Uruma Shimin-kai, Nishihara Shimin-kai, Motobu Shimin-kai, Nakagusuku Shimin-kai, Kitanakagusuku Shimin-kai, Ginoza Shimin-kai, Yomitan Shimin-kai, Higashi Shimin-kai, Kuba Shimin-kai y Henna Shimin-kai. También participé en los eventos del Fukuoka Kenjinkai, Kagoshima Kenjinkai, Miyazaki Kenjinkai, Kochi Kenjinkai, Kagawa Kenjinkai, Wakayama Kenjinkai, Gifu Kenjinkai, Aichi Kenjinkai, Kanagawa Kenjinkai, Ibaraki Kenjinkai, Tochigi Kenjinkai, Gunma Kenjinkai, Akita Kenjinkai, Iwate Kenjinkai y Hokkaido Kenjinkai. Creo que los diversos programas de estudio y de formación en el extranjero patrocinados por los municipios de Okinawa y otras provincias de Japón son muy valiosos para la continuación de la identidad nikkei.

En segundo lugar, las asociaciones japonesas del interior del país han realizado diversas actividades en los últimos años. En Córdoba, participé en la celebración del 85.º aniversario de la Asociación Japonesa de Córdoba, del Festival Internacional de Música de Cosquín organizado por la Municipalidad de Cosquín, y la celebración del 60.º aniversario de la escuela de Karate Shorin-ryu Miyazato Dojo. En el servicio consular, tuve la oportunidad de intercambiar opiniones con japoneses de las asociaciones japonesas de Posadas, Oberá, Garuhapé y Alto Paraná en Misiones, y participé en el Festival de Migración Internacional de Oberá y en el Baile del Bon de Garuhapé. En mis viajes de servicio consular, intercambiamos opiniones con los nikkei de la Asociación Japonesa de Posadas en Misiones, Colectividad Japonesa de Oberá y Zona Centro, Asociación japonesa de Garuhapé y Asociación Japonesa de Alto Paraná. También participé en la Fiesta Nacional del Inmigrante en Oberá y en el Bon Odori de Garuhapé.

En otro de los viajes del servicio consular intercambiamos opiniones con los nikkei de la Asociación Japonesa de Corrientes y la Asociación Japonesa del Chaco, y participé en el Festival Japonés organizado por la Asociación Japonesa del Chaco. En otro viaje de servicio consular, intercambiamos opiniones con los nikkei de las Asociaciones Japonesas de Jujuy y Asociación japonesa de Salta, y asistí al Festival Japonés organizado por la Asociación Japonesa de Jujuy. Durante otra visita consular, tuve la oportunidad de intercambiar opiniones con los nikkei de la Asociación Japonesa de Tucumán y la Asociación Nikkei de Tucumán, y participé en el Keiroukai organizado por la Asociación Japonesa de Tucumán y en la muestra de inmigración japonesa organizada por la Asociación Nikkei de Tucumán. En esa ocasión, tuvimos la oportunidad de conversar con nikkei de la provincia de Santiago del Estero y unos meses más tarde se creó la Asociación Nikkei de Santiago del Estero, que inmediatamente comenzó a dictar clases de japonés y atrajo a unos cien estudiantes. En otro viaje de servicio consular, pude intercambiar opiniones con miembros de las asociaciones japonesas de Rosario y Santa Fe. En Santa Fe, visité el Café Tokio, cuya historia es de más de cien años y está dirigido por un miembro japonés-americano de la Asociación Japonesa, y pude intercambiar opiniones con su propietaria nikkei. Además, con la cooperación de la Asociación Japonesa de Santa Fe, pudimos encontrarnos los nikkei de Paraná, Entre Ríos. En otro viaje, pudimos escuchar opiniones de miembros de la Asociación de Nikkei de Mendoza y, con la colaboración de la Asociación Nikkei de Mendoza, pudimos también conocer a nikkei de localidades del sur de la provincia, como Alvear y San Rafael. En el caso de la Asociación Japón en Catamarca, ella fue establecida después del evento Japón en Catamarca, en donde se celebró un Bon Odori con el apoyo de muchos miembros de la Asociación Japonesa de Córdoba, la Asociación Nikkei de Tucumán, la Asociación Japonesa de Tucumán, y la Asociación Japonesa de Santiago del Estero. En todos los casos me conmovió ver la sincera solidaridad entre los nikkei. De las veintitrés provincias de la Argentina, más de la mitad tienen asociaciones japonesas o nikkei, y creo que su existencia tiene un significado inconmensurable en cuanto a la presencia nikkei, la transmisión de la identidad nikkei, la difusión de la cultura japonesa y el desarrollo de las relaciones amistosas entre Japón y Asia. Admiro sinceramente su dedicación diaria, sobre todo sabiendo de todos los desafíos que deben enfrentar, que no son tantos en la CABA.

En cuanto a las actividades de los nikkei en el exterior, me gustaría mencionar la Convención Internacional Nikkei, que se celebra todos los años en Japón, y en junio de 2018 se realizó en Hawai en conmemoración del 150.º aniversario de la inmigración japonesa a Hawai. En esa ocasión participó un representante argentino del Centro Nikkei Argentino. Además, la Convención Panamericana Nikkei (COPANI) se celebró en Lima (Perú) en noviembre de 2017 y en San Francisco (California) en septiembre de 2019, con la participación de muchos nikkei de la Argentina, principalmente del Centro Nikkei Argentino y de la Fundación Cultural Argentino-japonesa.

El evento de Confraternidad Deportiva Internacional Nikkei (CONFRA) se celebró en Santiago de Chile en febrero de 2018 y en Sao Paulo en febrero de 2020, con la participación de muchos argentinos nikkei, principalmente del Centro Nikkei Argentino y de la Fundación Cultural Argentino-japonesa. Está previsto que en el año 2022 la convención se celebre en Buenos Aires. Creo que estas convenciones nikkei son muy importantes desde el punto de vista de la existencia de los nikkei, la herencia de la identidad nikkei y el intercambio entre nikkei a través de las fronteras.

En estos cuatro años tuve la oportunidad de participar de diversos intercambios con descendientes nikkei en el área metropolitana de Buenos Aires y en el interior y exterior del país, y por ello estoy profundamente agradecido.

Al mismo tiempo, si bien he podido participar de muchos de los mencionados intercambios, quisiera pedirles disculpas porque no he podido realizar actividades con todas las instituciones nikkei como hubiese querido, debido a limitaciones de tiempo.

En cada una de las instituciones japonesas que he mencionado he encontrado familia, amigos, profesores. Siempre me han recibido con los brazos abiertos y me han brindado enseñanzas como maestros de vida, por las que les estaré eternamente agradecido.
Estoy próximo a finalizar mi misión y regresar a Japón, y aún me quedan algunos trabajos pendientes y muchas provincias a las que no pude visitar, visita que se tornó más difícil aún por la situación de la pandemia del COVID-19. También lamento en el alma no poder saludar, como hubiese deseado, a todas las personas que me han ayudado en todo este tiempo. Espero puedan disculparme.

Espero algún día tener la oportunidad de regresar a la Argentina y reencontrarme con todos mis queridos amigos de la colectividad nikkei. Comparto con todos ustedes mis deseos y oraciones para que la colectividad japonesa de la Argentina se desarrolle cada vez más y continúe contribuyendo al fortalecimiento de la relación de amistad y cooperación entre Japón y Argentina.

* Embajada de Japón en Argentina