Miércoles, 27 de Junio de 2018
Caminando por el mundo

AVENTURERO japonés de 70 años ha recorrido 39.000 kilómetros; ahora, en Buenos Aires, dará una charla en la localidad de Caseros.

Hay aventureros que se lanzan a recorrer el mundo como mochileros, y hasta en bicicleta, pero en el caso de Sokichi Takashita, su periplo es a pie. En el 2009 comenzó a caminar por el archipiélago japonés, y hoy, con 70 años, ya está en Buenos Aires, en donde ha dado una charla en la sede de la Asociación Japonesa en la Argentina, y este viernes dará otra en la Universidad de 3 de Febrero (Urquiza 4750, Caseros, informes: 11 5340-3613; Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla ), a las 18.30.

Takashita, oriundo de Kobe, quien ya ha recorrido Canadá, Estados Unidos, Australia y Asia, por el desierto de Gobi, en Mongolia; China y África, a menudo es consultado sobre qué lo ha motivado a dejar todo y emprender esta aventura. Pero la respuesta, como la de otros muchos viajeros, resulta difícil de responder, por lo que solo resta conocer sus experiencias a lo largo de 39.000 kilómetros a pie, solo, y tirando de un carrito en donde lleva lo indispensable. 
Para darle aún más colorido a la aventura, en cada charla que da se presenta vestido de Tonosama, la vestimenta tradicional, algo que se le ocurrió en África, cuando todos estaban esperando que se apareciera vestido como un japonés de otros tiempos.

El amor y la emoción
Dice Takashita que en hoy, en Japón, hay mucha fortuna y uno puede comprar de todo, salvo dos: el amor (cariño de las personas) y la emoción. Con ese pensamiento, y como para confirmarlo, es que él salió a recorrer el mundo de esta particular forma, y así conocer a otras personas, otros países, otras culturas.
“La vida es una aventura atrevida o no es nada” y “Hago lo imposible, porque lo posible lo hace cualquiera”, son dos frases de cabecera que él tiene en su cabeza; la primera es de la escritora Hellen Keller; la segunda, del artista Pablo Picasso.
Así llegó hasta Tierra del Fuego, a menudo llamado como “el fin del mundo”, pero para Takashita es el lugar en donde planea vivir.